El Palacio Episcopal de Astorga es un edificio proyectado por el arquitecto modernista Antoni Gaudí. Está situado en la ciudad de Astorga (provincia de León), en cuya capital se encuentra la casa Botines, que junto con El Capricho de Comillas (Cantabria) son las únicas obras de Gaudí fuera de Cataluña. La construcción se llevó a cabo entre 1889 y 1915.
Esta obra pertenece al período neogótico de Gaudí (1888-1898), etapa en que el arquitecto se inspiró sobre todo en el arte gótico medieval, el cual asume de forma libre, personal, intentando mejorar sus soluciones estructurales. El neogótico fue en aquella época uno de los estilos historicistas de mayor éxito, sobre todo a raíz de los estudios teóricos de Viollet-le-Duc. Gaudí estudió con profundidad el gótico catalán, balear y rosellonés, así como el leonés y el castellano en sus estancias en León y Burgos, llegando al convencimiento de que era un estilo imperfecto, a medio resolver. En sus obras elimina la necesidad de contrafuertes mediante el empleo de superficies regladas, y suprime cresterías y calados excesivos.1
Desde 1962 el palacio alberga el Museo de los Caminos, dedicado al Camino de Santiago. El edificio fue catalogado como Bien de Interés Cultural el 24 de julio de 1969 con la referencia RI-51-0003827.